® lxc | locos por los autores. últimas noticias
LOLO DE JUAN
La eterna madrugada
El Vaquero Siempre me gustó madrugar. El café con la compañía de la lumbre. Hace frío afuera mientras el gélido rocío aguarda las primeras luces de la aurora. Madrugar da paz y ganas de comenzar de nuevo. La madrugada siempre tiene un instante de tranquilidad, aunque...
El Guindi
Tiempo de lectura: 3 minutos Ahí va el tío. Diego, nacido en Alicante hace treinta y nueve rutas del bakalao, conductor de ambulancias desde los 21, consumidor de cannabis desde los 6. Cinco palmos y medio de talla y unos sesenta kilos de nervio
Para no olvidar que algún día podemos olvidar
Tiempo de lectura: 2 minutos No sé qué hago aquí, lejos del terruño y del rastrojo ahora que el campo comienza a vivir tras la hibernación del estío. Olvidé mi ruta y mi destino. Pero Talibán me lleva a la tumba del Rey Pelayo. Olvidé las espuelas y pasé por alto el capote. Pero ese olvido da igual, porque marcho a buen tranco y el sol brilla sobre aquellos lares.
El cámara
A Nacho de la Moneda. Zaguero, Siempre en retaguardia. Oscura tez que nunca existe pero siempre espera. Camina sigiloso, cómplice de las luces, las aristas y las sombras. Pasa desapercibido porque su presencia no puede conocerse. Su misión es nítida y fugaz: capturar ...
Candida Juventud
Es fino y fibroso. Muy inquieto. De corte de pelo típico en los chavales de su quinta y educación. Ronda los 12 años, lo sé porque no es ni niño ni hombre. Está en mitad de la cuerda, a medio aire, como todos hemos estado alguna vez en nuestra juventud. Se llama...
Mirada de gitano
Tiempo de lectura: 4 minutos Tienes mirada de adivino, Samuel. Si es que esos ojos claros ven más allá de lo humano. Y es que Samuel, ya metido en años, se ha criado con su compadre Marcial de cuando estudiaban en un colegio de niños malos.
Canchalo y Palomares
Tiempo de lectura: 4 minutos No que estaban los de una academia de inglés, de esas de curso exprés, por la capital. Y de fin del programa acelerado para despacharte como un guiri habían resuelto hacer una convivencia en un pueblo de la sierra -un fin de semana entero en una villa pequeña- en el que todos convivirían para practicar su idioma adoptadoNo que estaban los de una academia de inglés, de esas de curso exprés, por la capital.
La espuma del mar
Tiempo de lectura: 4 minutos El aire pica de proa. Es un vendaval. Pero en lugar de estar surcando mares estoy navegando en las proximidades del Moncayo, del helador reino de Bóreas, el señor del frío. El Cierzo del Moncayo lo llaman. El bufido del invierno en toda su esencia.
Zarco
Tiempo de lectura: 4 minutos Lo recuerdo como si fuera ayer… Era uno de esos zarcos, fuerte como un león, pero arisco a cualquier caricia. Uno de esos que cuando pisaban el metal del carro era mansurrones pero que al inhalar sangre eran los mayores enemigos de sí mismos que jamás han existido.
La juventud de la sierra
Tiempo de lectura: 3 minutos Se me erizó la piel. Había crecido dos palmos. Lo que era un niño ya era un hombre. Y con hechos, no con palabras, acababa de demostrarlo.
La Lumbre
Tiempo de lectura: < 1 minutos Existe una compañera de presencia siempre llamativa y cuyo brillar, alerta las miradas y requiere de atenciones. En las frías mañanas de invierno -¡ay, cómo se echa de menos el frío y las escarchas…!- hay un olor único, dulzón y agradable, siempre grato, que transmite paz y sosiego. Hablo de la lumbre, la hoguera, la candela, la yesca o fogata.
Octubre
Tiempo de lectura: 2 minutos Atalayo antes del alba. Al amanecer los colores y sonidos más Vivos. Llevo a Montero de Nogales, tan joven como elegante. Va descubriendo mundo bajo mi alma. Y mi alma cabalga feliz de poder ser maestro hacia el animal que más me ha enseñado de soñar despierto.

