En relación a este twit del Sr Perez Reverte:
https://twitter.com/perezreverte/status/1353846895387570177?s=08
Estimado señor Reverte,
Vayan estas líneas con el respeto que siento por usted, pero creo que en esta ocasión no ha sabido analizar y juzgar con la debida justicia la fotografía objeto de su crítica.
No conozco a ninguno de los integrantes de la foto pero aparentemente son personas que viven en el mundo rural -en el campo o en el pueblo- y han decidido juntarse para dar un zapeo -una batida improvisada- en el acotado de su término. Pues además de tierras, siembras y viñas, tienen ganado. Con todo ello sobreviven sin dar cuentas al mundo y sin molestar al prójimo. Son los mal llamados habitantes de la España vaciada.
Y es que Jonás, el más viejo de la foto, ha advertido que le faltan dos corderos de la paridera. Y Bautista, otro de los presentes, tiene una parcela sembrada de triticale para hacer de primavera unas pacas de heno con las que seguir manteniendo a sus rollizas vacas. Fernando tiene una viña en las traseras de su huerto, con la que saca algo de vino para su uso. Pero este año entre los arrendajos, mojinos y cogutas, se han diezmado las producciones. El caso es que en la besana recién preparada para tirar la semilla, se ha advertido que una piara de marranos anda tras el cereal y todo lo han puesto patas arriba. Además, con estos fríos -por eso todos llevan gorro y orejeras- el campo no está cencido y el hambre aprieta, y no está reñido que esos dos corderos que le faltan a Jonás sean porque la matriarca de la piara se haya picado a los pares y -por ende- a la carne. Por ello es más dañino el jabalí que el lobo, pues el primero ataca sembrados, ganados y responsable es de muchos accidentes en carretera.
Ha sido Eulalio quien ha aprovechado el rocío de la mañana para rodear una morra donde ha visto entrada y ninguna salida. Los compañeros de la peña se han juntado, no han sorteado los puesto pues van a sacar una cosecha de carne a la sierra. Y sí, llevan ropas llamativas, porque los pantalones de pana y las botas de lona quedaron atrás. Por qué demonios la tecnología sólo pueden disfrutarla los que critican el campo. La pana y la boina quedan muy bien en un relato del maestro Delibes, pero mientras muchos critican desde sus apartamentos con suelo radiante, otros siguen calentándose con una chimenea y un brasero de picón. Ajenos a este mundo donde a cualquiera se le da voz y voto para hablar de lo que no sabe y criticar lo que no conoce.
En la morra se han metido los perros del Tarta -sí, que es tartamudo- y le acompaña su sobrino que tiene ganas de despuntar entre los pocos mozos del pueblo. Han dado con la piara de marranos y han salido en desbandada cada uno por un lado. Y entre todos ellos, improvisando la cacería, han logrado poner en tierra los tocinos de tres. Una cochina machorra que era la que capitaneaba el clan, otra cochina y una cría de este año. Sí, una cría de una arroba, mayor que cualquiera de los lechones que se sirven en un asador. Una cría que ya no tiene rayas -ha pasado de rayón a bermejo- y no es pecado echar a rodar a un animal que tiene defensa en su entorno, velocidad para huir y recursos propios para percibir el peligro, porque ya tiene capacidad de sobrevivir sin el resto.
El padre de Jonás se ha quedado preparando los avíos para echar en la parrilla ese marrajo. Las otras dos se dividen en lotes para repartirlos entre la cuadrilla. Mientras tanto Sebastián ha cogido tres muestras de los animales para que los analice el veterinario, no vaya a ser que tengan triquina.
Y se juntan en una mesa todos, con sus mujeres y demás viejos del lugar. Se comen lo que han cazado y lo que sobra lo reparten entre unos y otros. Feliciano dice que el marrano está mejor para chorizos que para tasajo. Pues para lo último es mejor el corzo y el ciervo.
Y sí, en la foto hay una botella de agua de cinco litros rellena de vino. Del poco vino casero que ha podido hacer este año Fernando, y lo pone como un trofeo más de la foto para decir que seguirá protegiendo su viña del jabalí, del pájaro y de aquel que le juzgue sin conocerle.
Esta es la caza auténtica que defiende la España despoblada contra aquellos que van el fin de semana de primavera a pasear por unos campos que ahora, en invierno, están vacíos con sus gentes de siempre.
Si algo me inspira esa foto es envidia, envidia de no formar parte de esa cuadrilla de gente auténtica, que disfruta de sacarle jugo al entorno y que aprovecha sus medios para seguir subsistiendo sin hacer daño a nadie. Y es una lástima que usted critique el pequeño jabalí de la foto cuando puedo apostarme un vino con usted a que lechales y marrajos han ocupado el plato de su mesa y la de sus lectores más veces de las que esa cuadrilla sale a cazar al cabo del año.
Con todo respeto,
Lolo De Juan
Escrito avalado por la junta del Real Club de Monteros
Todos aprendemos de todos, yo más que el resto, y sobre todo del Maestro Pérez-Reverte, y con este artículo, de mi amigo Lolo. Respeto al maestro y abrazo al amigo. Viva España, Viva el Rey, Viva la caza y, porque no, el lechón salvaje.
“Señor” Lolo de Juan, ya lo ha explicado Don Arturo por activa y por pasiva. Hay cazadores honrados, que cazan o pescadores que pescan para alimentarse, controlar a las especies ya que hemos alterado la cadena trófica y miserables que le tiran a todo lo que se mueve, matan hasta a sus perros cuando no les sirven y son unos verdaderos desalmados y unos hijos de la grandísima puta; se llamen Jonás, Emilio o Perico los palotes. A mí no me gusta la caza, y como Don Arturo, como carne y pescado. Lo siento está en nuestra naturaleza. También tengo familiares que han cazado e incluso yo les he acompañado alguna ves, siempre para zamparnos la pieza después; generalmente conejos. Y jamás se hicieron, ni nos hicimos una foto con el trofeo. Pero de ahí, a justificar a verdaderos hijos de puta que le tiran rayones o bermejo, a hembras preñadas, o dejan animales heridos o con la cabeza cortada por un trofeo; dista un mundo. Y no hace falta intentar adornarlo con prosa rebuscada “señor” Lolo, esos cazadores son una lacra y una plaga que hay que exterminar como a las alimañas.
Un saludo.
Bien dicho Lolo. A veces no miramos lo que se sirve en un plato pero criticar cuesta menos que esa cuenta.
Bien dicho Lolo. A veces no miramos lo que se sirve en un plato pero criticar cuesta menos que esa cuenta.
Gran contestación, Lolo. Menos mal que tenemos a gente como tú, escribiendo tan bien lo que pensamos. Un abrazo de un seguidor y amigo de tu familia, Guillermo Fernández-Daza
Me parece una magnífica contestación, siempre se juzga sin saber a los cazadores.
Me ha encantado el relato. Por su autenticidad. Por su frescura. Por recoger con, simples palabras, aunque bellas, unas realidades tan ajenas a muchos, pero que es el verdadero acontecer de los pueblos rurales. Sus penas y desdichas, acompañadas, porque no, de sus alegrias, a las que, como siervos de Dios, tienen derechdo.
Conozco, mucho, el linaje de su autor, y me consta que expresa, lo que le han inculcado sobre el campo y sus gentes. Mi enhorabuela
Excelente prosa la del Lolo….leo con frecuencia Pérez-reverte y la nota del señor De Juan es de un estilo singular..
Asi se dicen las cosas con educacion y respeto todo lo que no nos tienen a los cazadores valla un ole para usted y un saludo para todos los cazadores.VIVA lA CAZA
Excelente respuesta y correctivo sin insulto pero con la inteligencia de la fina ironía que, sin descalificar a nadie lo deja en la evidencia de su atrevida ignorancia o error. Dicho como lector y admirador del Sr. Reverte que en esta ocasión, que no es habitual, su comentario ha resultado muy desafortunado, creo que arrastrado por esa tendencia estúpida generalizada que alienta la valiente ignorancia revestida de torpe buenísmo.
Chapeau Sr Lolo de Juan. Me quedo con su directa, respetuosa y fina ironía que destila inteligencia y firme defensa de su conocimiento y saber del mundo real, rural y de la caza.
Buenísimo el relato de un día de caza de cualquier pueblo de España, desde Cádiz hasta Asturias donde la gente buena caza y se educa del campo sin entender nada de lo que en las ciudades dicen , critican y acaban convirtiendo en políticamente incorrecto . No se puede no entender el campo , la sierra , los perros , el frío o el calor , es simplemente incultura y envidia de los que con la Naturaleza y el atardecer o la luna , les basta para ser Felices . Me ha gustado mucho y se lo digo al autor .
Respecto de la carta de Perez Reverte en contestación al magnífico comentario del señor De Juan:
Yo considero que la carta no es razonable, nadie le obliga a ver fotos de animales muertos igual que nadie le obliga a ver otras cosas peores disponibles libremente en las redes sociales .
La carta es populista y propagandística para atraer a posibles lectores, se olvida de que gente mala existe en todos los sitios, en todas las profesiones, se mete con aquellos económicamente favorecidos (como él mismo) y además se mete con el Rey Juan Carlos.
Este señor ha perdido los papeles por vender papeles, sólo le importa el impacto mediático de sus comentarios para el incremento de su negocio.
Otro impresentable.
Armas y alcohol, luego asesinan a un compañero y ha sido un accidente. Y si, empiezan ya desde primera hora de la mañana beber, antes de salir a matar.
La verdad es que a mi también me parece una mala combinación la de armas y alcohol. Aunque gracias a dios la mayoria o consume muy poco o no consume nada de alcohol antes de cazar. Pero te corrijo lo de salir a “matar” porque se sale a cazar, y a veces, se mata. La caza incluye muchos mas elementos que el acto de matar, pero como en todo, siempre que un animal muere, alguien lo mata. Como se mata al cerdo para poder comer el sandwitch de jamon y queso o la ternera (si, una cria de vaca que aun bebe leche) para poder comer un filete.